¡Hola!
Encontré la receta en Objetivo: Cupcake Perfecto y, en este caso, la seguí casi al pie de la letra. A juzgar por los comentarios de los que la han probado, el resultado ha sido muy positivo.
Esta receta me ha gustado, y la recomiendo, principalmente por dos motivos:
a) Está riquísima.
b) Es muy fácil y relajante de hacer.
Solo tengo esta foto, lo siento. |
Los ingredientes son:
- 115g de mantequilla.
- 225g de azúcar moreno.
- 1 huevo.
- 250g de harina.
- 60g de nueces (Yo puse una vez, y las demás veces que la he hecho no he puesto nueces, y está mejor sin nueces)
- Dos puñados grandotes de chips de chocolate (Tened cuidado con vuestro concepto de "puñados grandotes". No os paséis que luego os sobrarán y no se mezclarán bien con la masa).
- 1 plátano maduro, machacado (A mí no me gusta eso de mezclar fruta con chocolate, así que no le puse y no pasó nada, me quedó muy rica de todas formas).
- 3/4 de cucharadita de bicarbonato de sodio (Echad a ojo, creo que el bicarbonato es algo así como la levadura pero para las galletas, para que se queden un poquito blanditas).
- 1/2 cucharadita de canela (Yo eché más y casi que mejor, pero depende de si os gusta la canela o no).
- Un pellizco de sal.
- 1 cucharadita de extracto de vainilla .
Los pasos a seguir:
Primero ponemos el horno a calentar a 180º.
Luego derretimos la mantequilla en la sartén. Yo puse el trozo entero, pero, obviamente, si la troceáis, se derrite antes. Entonces, añadimos el azucar y la vainilla, lo mezclamos todo y quitamos la sartén del fuego. Después añadimos el huevo y volvemos a removerlo todo bien.
A continuación, añadimos la canela y el plátano (si os habéis animado a ponerle).
Echamos la harina, el bicarbonato y la sal, batimos y lo mezclamos todo bien.
Para terminar, añadimos las nueces y las chips de chocolate, intentando removerlo todo bien; pasamos la masa de la sartén a un molde y lo metemos en el horno unos 20 minutos, hasta que se quede crujiente por fuera, blandita por dentro, y el palillo/tenedor/lo-que-usemos-para-pinchar-los-bizcochos salga limpio.
Luego esperamos un ratito a que se enfríe y a) nos la podemos comer con las manos cortándola en trocitos b) podemos hacer como hace Alma y comérnosla con helado.
A mí ya me parece lo suficiente empalagosa como para añadirle helado, pero igual con helado de vainilla está rica.
El pequeño problema de esta receta:
Es una receta muy fácil y rápida de hacer. Sin embargo, es muy fácil que se quede demasiado dura y, aunque sigue estando rica, te dejas los dientes comiéndotela. Entonces, después de varias pruebas he descubierto cómo hacerla para que se quede blandita.
Para empezar, a la hora de derretir la mantequilla, os aconsejo que la derritáis totalmente. Que no se quede blandita, no, líquida líquida. Así será más fácil de mezclar luego los demás ingredientes, la masa se quedará menos dura y será más fácil ponerla en un molde.
Luego es importante que uséis un molde muy poco hondo y grande. Que quede una masa finita, porque si la ponéis en un molde muy hondo y pequeño, tardará mucho más en hacerse por dentro, se os acabará quemando por fuera y al final os quedará una tarta dura y encima medio cruda en algunos sitios. Así que tened cuidado con el molde que utilizáis.
Finalmente, controladla bien mientras esté en el horno. Cuando pasen 15 minutos, id pinchándola con un palillo o algo, y por distintos sitios. Cuando veáis que sale limpio, sacad la tartagalleta del horno.
Conclusión:
¡Tenéis que hacer esta tartagalleta! O convenced a alguien para que os la haga... ¡Pero probadla!
Es muy fácil y rápida de hacer, podéis hacer incluso dos a la vez y os saldrán bien (comprobado personalmente), y está muy muy rica.
El pequeño problema de esta receta:
Es una receta muy fácil y rápida de hacer. Sin embargo, es muy fácil que se quede demasiado dura y, aunque sigue estando rica, te dejas los dientes comiéndotela. Entonces, después de varias pruebas he descubierto cómo hacerla para que se quede blandita.
Para empezar, a la hora de derretir la mantequilla, os aconsejo que la derritáis totalmente. Que no se quede blandita, no, líquida líquida. Así será más fácil de mezclar luego los demás ingredientes, la masa se quedará menos dura y será más fácil ponerla en un molde.
Luego es importante que uséis un molde muy poco hondo y grande. Que quede una masa finita, porque si la ponéis en un molde muy hondo y pequeño, tardará mucho más en hacerse por dentro, se os acabará quemando por fuera y al final os quedará una tarta dura y encima medio cruda en algunos sitios. Así que tened cuidado con el molde que utilizáis.
Finalmente, controladla bien mientras esté en el horno. Cuando pasen 15 minutos, id pinchándola con un palillo o algo, y por distintos sitios. Cuando veáis que sale limpio, sacad la tartagalleta del horno.
Conclusión:
¡Tenéis que hacer esta tartagalleta! O convenced a alguien para que os la haga... ¡Pero probadla!
Es muy fácil y rápida de hacer, podéis hacer incluso dos a la vez y os saldrán bien (comprobado personalmente), y está muy muy rica.
QUIERO.
ResponderEliminarSi solo pudiste subir esa foto significa que la tarta estaba tan buena y olía tan bien que nadie pudo resistirse a echarle un bocado. So... ¿Por qué vas a sentirlo? xDDD
ResponderEliminarRecuerdos de mis muelas doloridas, echan de menos tu tartagalleta. :D