¡Hola!
"He decidido que, como nadie lee ni comenta, voy a hacer lo que me de la gana en el blog. Y hoy me apetece escribir sobre algo que se me ha ocurrido antes mientras "estudiaba". Y pongo estudiaba entre comillas porque en mi carrera algunas asignaturas son más de leer que de estudiar en si.
El caso es que estaba yo leyestudiando Narrative of the Life of Frederick Douglass y Incidents in the Life of a Slave Girl, de Harriet Jacobs y estaba sufriendo con esas narraciones que, efectivamente, son biografías de esclavos negros americanos; y me he puesto a pensar.
Estamos saturados con los típicos mensajes sobre lo positiva que es la lectura, la cultura que nos aporta y lo beneficiosa que es para nuestros estudios, y todo eso. Tan saturados que a mí me empiezan a cansar las frasecitas. Seamos sinceros... ¿leéis porque queréis ser más cultos y escribir mejor? ¿o porque os gusta? Yo creo que leer con fines educativos es un poco... estúpido. Estúpido y frustrante, porque es un proceso muy muy lento en realidad. Sí, está claro que mejora tu ortografía, vocabulario, forma de escribir... pero es de una manera tan imperceptible que ni te das cuenta.
¡El caso es que hoy he descubierto algo! ¡Hoy he encontrado ideas y pensamientos nuevos en mi cabecita! Llevo tiempo notándolo, ayer, sin ir más lejos, solté un minidiscursito en clase de inglés acerca de la esclavitud y la esclavitud actual ¡Y estaba seria! Quiero decir, ¡estaba diciendo las cosas con convicción! ¡Tenía nuevas ideas propias! Este cuatrimestre he descubierto que, a base de leer obras de teatro raras sobre temas muy diversos y a base de leer obras de los orígenes de la literatura americana, ¡me he vuelto más madura!
Pero no todo se debe a un solo cuatrimestre, desde que empecé a leer, he ido abriendo mi cabeza y ampliando mis horizontes sin darme cuenta. Muchas novelas han pasado sin pena ni gloria por mí, pero otras me han marcado y probablemente ahora no sería así si no hubiera leído algunas novelas.
Ahora mismo llevo un tiempo que las novelas juveniles no me llaman nada. Casi todas las que leo son recomendaciones de amigos. Entonces siento que necesito leer algo que... que no me lo ponga tan fácil, que me haga calentarme la cabeza y me dé cosas que pensar. Me imagino a un adulto diciendo como orgulloso "Elena, eso es que te has hecho mayor y has madurado" y me indigno. Pero... ¿podría ser verdad? No por la edad, sino en el sentido de que alguien necesite algo más complejo para sentirse motivado al leer. Sin embargo, hay novelas juveniles muy buenas y que merecen la pena."
Ahora, unos 7 meses después de haber escrito esto, pienso que la literatura juvenil no es una etapa sino un género literario más. Igual que los demás, tiene unas características propias y una de ellas es precisamente que es muy fácil y rápido de leer. Da mucha menos pereza coger... Divergente que coger algún clásico o alguna novela adulta. Pero con la literatura romántica pasa lo mismo. Y yo creo firmemente que hay que disfrutar leyendo. Y para eso hay que leer lo que nos apetezca o nos pida el cuerpo, los impulsos. Según el momento, necesitamos un género distinto, y está todo bien.
Ahora bien, al mismo tiempo, pienso que si vamos a leer "clásicos", necesitamos informarnos primero. No se trata de leer las opiniones de los críticos literarios, pero es que esos libros se escribieron en una época distinta con un contexto histórico y social diferente al nuestro que suele estar reflejado de alguna forma en las obras. Puede haber muchas referencias y metáforas que en su momento la gente entendiera pero que nosotros las leemos y ni nos enteramos. Y eso puede hacer que esa obra nos resulte un poco indiferente. También es interesante saber exactamente por qué esa obra es considerada tan buena, ya que puede ser por muchos motivos. Y si lo sabes, cuando estás leyendo puedes fijarte. Un ejemplo que me viene a la mente es el famoso Quijote, yo lo tuve que leer (y no pude) en bachillerato y me pareció un aburrimiento; luego lo volví a leer este año en la Universidad mientras la profesora nos explicaba muchas cosas de la obra, y me gustó mucho. Otro ejemplo es el de The Scarlet Letter, una novela que estoy estudiando en Literatura americana y que se centra en la psicología de los personajes después de que la protagonista haya cometido adulterio y que está lleno de metáforas y de adjetivos que tienen importancia. Si no fuera por mi profesora, esta novela me resultaría infumable, pero, gracias a toda la información que nos da, entiendo que esté tan bien considerada en la literatura americana.
El caso es que pienso que hay que leer de todo y no hay que menospreciar ningún género literario. Creo que se pueden sacar ideas nuevas de cualquier obra si ponemos de nuestra parte. También pienso que está bien que nos propongamos leer "clásicos" aunque nos dé pereza porque sí que es verdad que pueden aportarnos muchas cosas, y sobre todo porque da una satisfacción tremenda leer y disfrutar con obras así. Y lo mejor de leer y estudiar estas obras es que luego leemos las novelas actuales desde una perspectiva mucho más interesante y valoramos cosas que antes no habríamos valorado. Por ejemplo, leyendo El nombre del viento me di cuenta de que Rothfuss juega muy bien con la duda sobre la veracidad de la historia que nos está contando Kvothe y le da un punto misterioso que me gusta mucho. Y esta técnica la he visto antes en otras obras que he estudiado en clase y me ha hecho valorar más ENDV. Digamos que no es lo mismo leer una novela sin más, a leerla mientras te das cuenta de cosas como esta. ¿tiene sentido? Es como que ves que el autor ha metido todos estos elementos adrede con un propósito y entonces todo te parece más interesante.
Es posible que esta entrada me haya quedado un poco caótica, pero es que no sé cómo hacerla más clara y ordenada sin soltar todavía más rollos que a nadie le interesan. Así que solo espero haber transmitido algunas ideas sobre el tema y que no os hayáis aburrido mucho. ¿Qué opináis vosotros?
¡Hola!
ResponderEliminarCreo que he captado lo que quieres decir...
A mi los clásicos me gustan, suelo tener en cuenta el contexto y los disfruto, tal y como dices. Pero también disfruto de la literatura de otros géneros porque pienso que no solo los clásicos te dan a pensar. Es posible que muchas novelas juveniles y románticas sean simples y con el único fin de entretener, pero cada vez hay más que intentan transmitir un mensaje y así evoluciona el género.
Así que, sí, hay que leer de todo y mejor si conoces lo que estás leyendo ^^
Un beso!
¡Hola!
ResponderEliminarEntiendo perfectamente lo que quieres decir y me siento identificada contigo. Yo por lo general prefiero los clásicos a la literatura juvenil porque tengo predilección por el lenguaje formal, detallado y con vocabulario un poco más trabajado. Además los diálogos no suelen tener ni punto de comparación. Pero eso no quiera decir que un día lea algo juvenil y también me guste mucho. Estoy contigo en eso de que cada género es un mundo y no se trata de una etapa. El hecho de que por ejemplo lea erótica no quiere decir automáticamente que el libro sea malo. Puesto que hay libros buenos y malos en todos lados.
Creo que a mi también me está quedando un comentario muy caótico pero espero que me entiendas.
Pido perdón si no me paso muy a menudo, aunque estoy suscrita vía mail a veces me pierdo entradas. En la anterior no comenté porque no he leído NADA de Cazadores de Sombras y como no sé si la leeré o no no quiero hacerme spoilers.
Un beso :)
La verdad es que tienes mucha razón al decir que la literatura juvenil, más que una etapa, es un género literario. Y la verdad es que, si no fuera por muchas de nuestras profesoras, hay muchos clásicos que no leeríamos. ¡Y luego resulta que nos enganchan!
ResponderEliminarBesos,
Ana